El deportivo alemán Artega, fabricado entre 2010 y 2012 en 153 unidades, todas ellas con motor V6 procedente de Volkswagen, esta de vuelta. La empresa, nuevamente en manos de su original propietario, propone ahora una tracción puramente eléctrica para su atractivo deportivo dos-plazas, y una producción muy limitada para garantizar su exclusividad.
Klaus Dieter Frers, propietario entonces de un importante proveedor del ramo automovilístico, quería realizar su sueño de un deportivo propio, también con el fin de demostrar lo que su empresa fuese capaz de realizar. Nació el GT, diseñado por Henrik Fisker (quien también diseñó el Aston Martin DB9 y el BMW Z8) y presentado en 2007 en el Salón Internacional del Automóvil de Ginebra (Suiza). En aquellos momentos se empezaba con el alzamiento de una planta de producción propia de 4.000 metros cuadrados.
El GT, en cambio, recibía un motor Volkswagen V6 de 3.597 cc y 300 CV a 6.600 rpm, bien para garantizar elevadas prestaciones y mucha alegría de conducir…
Tras problemas con la empresa años después, se tuvieron que buscar nuevas fuentes de capital, encontrándolo en la empresa mejicana Tresalia Capital en 2009. Tras un cambio de responsables se logró una producción limitada de 153 unidades entre 2010 y 2012. En 2011 se presentó el prototipo de una versión eléctrica, que no tuvo continuidad.
Actualmente la empresa se encuentra de nuevo en manos de su antiguo propietario Klaus Dieter Frers, quien ha perfeccionado la versión eléctrica del Artega y sueña ahora con producirlo. Artega esta de vuelta.
Ofrece su nuevo modelo con dos motores eléctricos Voltabox de entre 150 a 195 kW cada uno, alcanzando un total de unos 385 kW máximas, lo que serían respetables 525 CV. Además desarrollan un par motor de 780 Nm, lo que dar elevadas prestaciones, que se cifran en 3,6 segundos de 0-100 km/h y una velocidad tope estrangulada a 250 km/h. Lleva tecnología espacial con un vectoring óptimo de par y revoluciones de hasta 12.500 rpm; alcanzando un grado de eficiencia del 95%. Gracias a potentes baterías de litio-ion, combinadas con una serie de ultracondensadores (super caps) – un sistema de recuperación de la energía eléctrica en las frenadas y su uso en las aceleraciones, lo que aumenta la autonomía -; se habla de una autonomía que ronda los 400 kilómetros.
El sistema de recarga permite varias opciones, con 64 kW se puede recargar la batería completamente en menos de una hora, a 22 kW se tardaría unas dos horas, y en un enchufe doméstico de 16 amperios la recarga duraría unas diez horas.
Primeramente Artega quiere producir doce unidades solo bajo pedido. Tras ello pretende lanzar un nuevo modelo con otro nombre, pero parecida mecánica.
25 Octubre 2015
Artega Scalo, bienvenido de nuevo
por
V. Christian Manz
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