EVS27 Barcelona

La EVS27 (el mayor simposium internacional del vehículo eléctrico) se celebraba entre los dias 16 y 20 de noviembre tanto en la calle - para un público general, los viandantes y los turistas (en la plaza Arc de Triomf en Barcelona) - como por dentro en los pabellones de la nueva Fira de Barcelona, donde sólo tenían acceso los profesionales, conferenciantes y algunos periodistas. Fue todo un éxito - a pesar de que parte de la demostración a la intemperie fue victima de unas lluvias torrenciales el sábado y el domingo por la tarde. Pero nunca antes se había visto no sólo tantos vehículos eléctricos juntos, sino tampoco tanta empresa nueva - procedente de diferentes países - que busca un hueco en este gran desafío de un futuro mejor, más limpio y más conectado.




La ExpoElectric-FòrmulaE, un evento independiente, se unió a la EVS27 de Barcelona en la mayor concentración de vehículos eléctricos en una ciudad. El fin de semana 16 y 17 de noviembre los vehículos se reunieron en la emblemática plaza  Arc de Triomf,  rodeándola, y en el centro dentro de carpas, automóviles, motos, bicicletas, karts y otros tipos de vehículos eléctricos. Fue una oferta al público en general, gratuita, graciosa, interesante y coloquial, además el viandante podía, espontáneamente, dar una vuelta con el Volkswagen E-Up, que llegará a principios del año que viene a España, el BMW i3, ya en venta en algunos concesionarios de la marca, el Nissan Leaf, el veterano, pero más actual que nunca, y el pequeño IcarO, un microcoche representado por su empresa madre china.

Durante dos horas de la mañana del domingo se cortaron algunas calles lindantes a la plaza para el tráfico convencional,  para permitir en este tiempo sólo el uso de vehículos eléctricos, con el fin de realizar mediaciones y comprobar cómo se reduce la contaminación in situ. Participaron modelos de todas las marcas, un pesado camión basura de Iveco, un autobús de línea ByD, motos, patinetes, monoruedas, trikkes… todos ellos solo propulsados por la electricidad. Bajó sustancialmente el ruido… y los malos olores, más, por desgracia invisible, la expulsión de los nocivos  partículas cancerígenas de los motores diésel.

Para los más pequeños había karts eléctricos y un pequeño circuito con curvas cerradas – ¡que bien lo pasaron! En una pequeña explicación anterior los kids fueron advertidos que iban a utilizar un vehículo eléctrico, no contaminante, y que además, podría recargarse con energía solar (si los políticos lo permiten, claro).

En las carpas había de todo. Las en su mayoría jóvenes empresas, muchas de ellas pequeñas, ingenian nuevos conceptos para garantizar una cada vez mejor y mayor movilidad en las grandes ciudades. Los ingenios van desde las bicicletas eléctricas plegables, algunas de ellas aptas para llevarlas en el Metro, a bicicletas eléctricas más cómodas al estilo moto clásica, triciclos y patinetes de todo tipo, hasta singulares modelos monoejes que no se tumban debido a su especial tecnología y que se manejan con los movimientos del cuerpo.  Otra idea que se está introduciendo es la bicicleta de alquiler, desde y hasta cualquier punto de la ciudad al precio del metro.

Un comentario nos llamó mucho la atención: un joven empresario comentaba a Prestige Electric Car que su singular bicicleta eléctrica, producido/ensamblado en Barcelona con los mejores componentes y artesanalmente, interesa mucho más a los extranjeros que a los nacionales. Los que más se pararon en su carpa fueron los turistas, pidiendo todo tipo de información; y solo pocos españoles. En nuestro país, aún, hay un reducido interés en lo bonito, lo práctico, lo medioambientalmente correcto, lo moderno, lo inspirado… en todos estos temas nos ganan la gente de otros países, que suelen sentirse más atraídos por estos valores, y sobre todo por un futuro nuevo y emocionante.

Prestige Electric Car también tuvo la oportunidad de realizar una toma de contacto tanto del nuevo BMWi3 como del Volkswagen E-Up. Del i3 nos gusta su filosofía de un automóvil diseñado y construido expresamente para ser eléctrico, con novedosas ideas en líneas y realizaciones, su excelente y potente motor con una aceleración al estilo de los grandes BMW deportivos y su aspecto de BMW, sobre todo en calidades y prestaciones; pero lo que criticamos – en general en los automóviles eléctricos demasiado sofisticados – es el completo control que tiene la central de cada automóvil, sus ocupantes, su ubicación… y hasta las costumbres del conductor. A través del Smartphone y la informática inteligente. Si no ponemos freno a estos avances, pronto seremos esclavos del sistema (aún más de lo que ya somos), porqué nos pueden controlar todo. También hay una tendencia de quitar al conductor todo el trabajo, todo hace la máquina, también frena por ti.

El Volkswagen E-Up, en cambio, es más el automóvil de siempre, pero eléctrico. Es agradable de conducir, mantiene los “trabajos” del conductor, que puede y tiene que intervenir y manejar, y cuenta con el novedoso sistema del cambio de marcha, estilo automático, que, en tres niveles, desacelera el automóvil, recuperando energía que se introduce en las baterías. Quien perfecciona su conducción, logra parar delante de los semáforos sin tener que pisar el pedal del freno. Pero, ojo, las luces de freno siempre se encienden en estas maniobras, no hay peligros para los automóviles que nos siguen. Lo que en el Volkswagen es un manejo manual de los cambios y la intensidad de la frenada, en el BMW es totalmente automático. ¡Ya!, pero nos sentimos un poco como tontitos a los que hay que arreglar todo.

Ya somos lo suficientemente tontos para como llevamos nuestra vida, conformándonos cada vez con menos y dejándonos manipular por todos lados. Nosotros, personalmente, somos partidarios de poder tomar nuestras propias decisiones sin tanta intervención desde fuera.